Aunque para el gran público el nombre de Valerian no es muy conocido, es muy probable que ya hayas visto más de una escena o imagen que ha venido directamente del cómic creado por Pierre Christin y Jean-Claude Mézières. Y es que los cómics en los que se basa la película ‘Valerian y la ciudad de los mil planetas‘, que se estrena el 18 de agosto bajo el patrocinio de Orange, han sido claves en distintas obras de ciencia ficción de los últimos cincuenta años.
En los cómics de Valerian se presentan mundos muy ricos, llenos de vida, con fusiones entre lo antiguo y lo moderno… y el hecho de que los protagonistas sean agentes espacio-temporales hace que nos encontremos con miles de civilizaciones de lo más variopintas que, sin duda, han servido de inspiración para otras obras.
Star Wars: el principal homenaje a Valerian
Probablemente la obra que más le debe a los cómics de Valerian sea la mismísima Star Wars. Aunque George Lucas nunca ha comentado nada al respecto, es innegable la influencia del arte de Jean-Claude Mézières en la producción de las películas, tanto la trilogía original como (aún más) en las posteriores. Un ejemplo lo tenemos en las siguientes imágenes:
Cuando se estrenó ‘La Guerra de las Galaxias’, ya habían salido en Francia siete tomos de ‘Valérian et Laureline’, que no se tradujeron al inglés hasta bastante después. Pero eso no suele ser problema para los artistas de producción o para los guionistas, siempre atentos a las nuevas tendencias en los diseños y géneros.
Prácticamente es ver cualquiera de las películas de Star Wars en la pantalla y ponerse a reconocer elementos, paisajes y ciudades vistos ya en Valerian. Las calles de la ciudad portuaria de Mos Eisley, desde donde Luke Skywalker parte de Tattooine, bien podrían ser las de Sirta-el-magnífico, capital del Imperio de los mil planetas.
Pierre Christin acogió muy bien la película:
Conecté de inmediato con Star Wars por el número de cruces y paralelos con nuestras viñetas. George Lucas había creado mundos complejos, igual que nosotros. También había establecido el funcionamiento interno de las sociedades, aunque Star Wars giraba más en torno a la lucha entre el bien y el mal. Respecto a esto, Valerian era más europea, más intelectual.
Algo menos entusiasta se mostró Mézières, que reconoció haber tenido sensaciones encontradas al ver en la gran pantalla diseños tan similares a los suyos. Por un lado, se sintió halagado; por otro, un poco disgustado porque no hubieran contado con ellos para realizar el arte conceptual de la saga.
Mœbius, el «prosélito» de Valerian en Alien
Mención aparte merece también otro de los maestros del cómic francés. Jean Giraud, más conocido como Mœbius, fue en vida un gran amigo de Jean-Claude Mézières y reconocido fan de Valerian. Esto hace que su trabajo como diseñador en Hollywood tenga esa familiaridad con la obra de colega, como demuestra ‘Alien’, de Ridley Scott.
El insigne director, enamorado del arte de Jean Giraud y de las ideas de Jodorowski, quiso contratar para Alien al equipo detrás de los diseños de la fallida Dune (diseños en los que, a su vez, se inspiró Lynch para su versión). Así, el dibujante francés es el responsable de los espectaculares diseños de la película, con una fusión entre biología y tecnología que ha perdurado hasta la actualidad y que ya se veía en los cómics de Valerian.
No sería el único trabajo de Mœbius para el cine, ya que estuvo vinculado a otros títulos míticos, como TRON, Willow y El quinto elemento.
Luc Besson: de El quinto elemento a Valerian y la ciudad de los mil planetas
Mézières pudo participar, al menos en una fase previa, en los diseños de ‘El quinto elemento‘, junto con su buen amigo Jean Giraud. Allá por los años 90 del siglo XX, Luc Besson, declarado fan de los cómics (de hecho la adaptación al cine es un empeño personal suyo), pidió al artista que reimaginara una Nueva York del futuro para una posible película.
El resultado, junto con grandes ideas plasmadas en Valerian, como los taxis voladores de El círculo de poder y la gran importancia de los llamados «elementos clásicos», se vio en una de las mejores cintas de ciencia ficción de la década: El quinto elemento. Sin embargo, Mézières se desvinculó del proyecto años antes de que este se materializara.
En ‘Valerian y la ciudad de los mil planetas’ vemos cómo el círculo de referencias se cierra. Luc Besson, como apasionado de la ciencia ficción que es, plasma en la película diversas imágenes que podemos reconocer de otras películas y que, a su vez, estas tomaron de los cómics. Así el ojo del cinéfilo puede reconocer por ejemplo cintas como Blade Runner de Scott, Avatar de James Cameron o El destino de Jupiter de las Wachowski. Pero Valerian vino antes, aunque fuera en papel.
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