Qué es y qué hace Neuralink, la otra empresa de Elon Musk

NeuralinkEl dueño de Tesla y SpaceX, Elon Musk, no deja de sorprender. A través de su empresa Neuralink Corporation, el emprendedor estadounidense anunció una novedad potencialmente revolucionaria en una charla por Clubhouse. 
Una futura gran ayuda para personas que padecen trastornos cerebrales o de la columna.

Neuralink estudia el ámbito de la interfaz neuronal (cerebro-ordenador). El objetivo es utilizar la tecnología para reemplazar las funciones cerebrales comprometidas por traumas o enfermedades neurodegenerativas. Sin embargo, el último experimento es un poco curioso, ya que consistió en instalar un chip en el cerebro de un mono para permitirle jugar a los videojuegos. Según ha informado Musk, el componente no tiene absolutamente nada de peligroso o doloroso para el animal. Y, según parece, el mono pudo jugar a los videojuegos controlándolos con su mente.

Índice

  1. ¿Qué es Neuralink y qué hace?
  2. La tecnología de Neuralink: la interfaz cerebro-máquina
  3. ¿Realidad o ciencia ficción?

El chip de Neuralink, llamado The Link, sería un gran salto en tecnología y medicina. Sin embargo, todavía existen muchos riesgos y dudas. Y ya no solo por la conocida actitud fantasmática del propio Musk. A nivel técnico, la empresa utiliza electrodos flexibles más delgados que un cabello humano, pero los dispositivos actuales aún pueden causar daños irreparables al cerebro humano. La esperanza es conseguir que el proceso de instalación y extracción no sea tan invasivo.

Musk nunca ha ocultado su fe en que los dispositivos BMI (interfaz cerebro-máquina) puedan ayudar a los humanos a mantenerse al día con la inteligencia artificial, e incluso aumentar nuestra capacidad cognitiva. Sin embargo, de momento, el objetivo se limita a crear un dispositivo implantable que permita a las personas controlar teléfonos y ordenadores con la mente.

Neuralink cuenta con un centenar de trabajadores, con una rotación muy rápida. Desde su fundación, en 2016, todos los empleados, salvo dos, han cambiado. Según un informe independiente, algunos ex trabajadores informaron sobre importantes problemas internos. Se habla de caos y exceso de estrés por tiempos de trabajo excesivamente comprimidos. Y, sobre todo, se avanzan perplejidades éticas por el uso del enfoque típico de las startups: «muévete rápido y rompe cosas». Especialmente, cuando se trata de experimentos delicados que también incluyen la cirugía en animales.

Musk se está centrando en el lanzamiento al mercado de The Link, dejando claro que será muy costoso al principio. El objetivo, sin embargo, es reducir progresivamente el precio hasta llegar a unos pocos miles de dólares. Además del importe, uno de los desafíos a enfrentar para transformar la interfaz cerebro-máquina en un producto masivo será superar los temores de las personas. De hecho, según ha informado la revista especializada ‘Cnet’, la instalación de la misma podría generar infecciones.

LA interfaz cerebro-máquina de Neuralink

En agosto de 2020, Neuralink hizo público un experimento realizado con el cerdo Gertrude. La demostración tenía como objetivo revelar el nivel de desarrollo alcanzado por su tecnología. En comparación con 2019, cuando solo se mostraron algunas fotografías y ninguna prueba práctica de su funcionamiento, el diseño había cambiado significativamente.

De hecho, al principio, el sistema de Neuralink consistía en un implante externo que se instalaba detrás de la oreja. Ahora tiene la apariencia de una moneda que se puede colocar directamente en el cráneo cavando un pequeño hueco, de modo que resulta invisible. La comunicación con el exterior se realiza mediante un sistema inalámbrico basado en tecnología bluetooth de bajo consumo para interactuar con un ordenador o incluso con un smartphone.

La existencia de un sistema que traduce la actividad cerebral en datos digitales y, por tanto, actúa como una interfaz cerebro-máquina, no es en sí misma una novedad. Tecnologías de este tipo existen desde 2006. Algunos ejemplos de aplicaciones clínicas de estas herramientas incluyen implantes cocleares, estimulación cerebral profunda y prótesis motoras. Además, la adquisición e interpretación de señales electroencefalográficas ya se ha utilizado con éxito para controlar el movimiento de una silla de ruedas en trayectorias predefinidas y para la síntesis del habla de un conjunto definido de palabras. Algo muy útil para personas que hayan sufrido daños cerebrales o parálisis.

El aspecto más interesante del trabajo de Neuralink es probablemente la estructura del dispositivo en sí. En particular, el sistema de 1.024 hilos flexibles muy delgados que recogen los impulsos y luego los traducen en información digital. Por el momento, los hilos extraen información de la corteza cerebral, pero la idea es que en el futuro puedan profundizar aún más a través de una especie de microtúnel en el cerebro.

¿Realidad o ciencia ficción?

Los desafíos a los que se enfrenta Neuralink desde un punto de vista técnico son, al menos, un par. Por un lado, producir hilos más finos y numerosos para recoger cada vez más información. Por el otro, conseguir que el dispositivo resista el mayor tiempo posible en el ambiente altamente corrosivo del cerebro. El objetivo declarado es que, al final del desarrollo, The Link pueda durar décadas implantado.

Los primeros ensayos en humanos deberían comenzar este año y afectarán a un pequeño grupo de personas que sufren graves lesiones en la médula espinal. La esperanza, de hecho, es que el desarrollo de la tecnología Neuralink les permita (en un futuro no especificado) recuperar parte de su movilidad.

Además, las iteraciones de este dispositivo tendrían el potencial para reparar las conexiones neuronales dañadas en todas aquellas personas que padecen trastornos cerebrales, incluido el Párkinson. Y también podría ayudar a estimular la liberación de oxitocina, serotonina y otras sustancias químicas cuando sea necesario. En definitiva, ayudar a todas las personas que sufren ansiedad y depresión.

Musk luego habla de «telepatía conceptual». De un futuro en el que «la inteligencia humana y la artificial se vuelven simbióticas». Y también de «visión aumentada», de «guardar y revisar los recuerdos» y de “by-pass para parapléjicos y tetrapléjicos”. En fin, todas aplicaciones sin duda muy interesantes que forman parte de los objetivos teóricos de Neuralink, pero que parecen estar más cerca de la ciencia ficción. Y lo cierto es que de momento hay muy pocos resultados concretos, excepto un mono que juega a los videojuegos.

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Imágenes | Josh Riemer/Unsplash

Una respuesta a “Qué es y qué hace Neuralink, la otra empresa de Elon Musk

  1. Hola
    Me parece un trabajo muy interesante y esperanzador muchas personas obtendrían saludables beneficios
    Éxito con el desarrollo de la Neurociencia
    Que llaman Neuralink
    Dios mediante amén

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