Las tecnologías que nos ayudan a no tocar nada

Biometría

En esta época altamente higienizada, las superficies se han convertido en el enemigo número uno por su supuesta capacidad para propagar contagios.

El toqueteo de barandillas, sillas o interruptores de la luz es inevitable. Solamente el jabón, las soluciones hidroalcohólicas o, en este caso, la tecnología contactless o touchless pueden ayudarnos a reducir las posibilidades de expansión del virus de la COVID-19.

En auge 

Las herramientas contactless o touchless llevan un tiempo en nuestras vidas. No obstante, ha sido en los últimos meses cuando han experimentado un renacimiento a raíz de la pandemia.

Un estudio de Capgemini realizado a más de 6.000 personas de 12 países confirma que la COVID-19 ha actuado como catarsis para la adopción y aceleración de estas tecnologías. El 77% de los encuestados afirman que las utilizaron de forma habitual durante el pico del coronavirus. Por otro lado, el 62% asegura que las seguirá empleando en la nueva normalidad. En Amazon, búsquedas como “dispensador de jabón automático” o “pomos de puerta digitales” crecieron un 548% y un 125%, respectivamente.

Igual que sucede con las mascarillas, en Asia nos llevan ventaja en esto de no tocar demasiado las cosas. Algunos señalan su experiencia con otras pandemias como el SARS y otros apuntan a su cultura tecnológica. Quien haya viajado a Japón y haya tenido que usar el baño lo entenderá.

Tecnologías touchless que ya conocemos y las que vendrán

La domótica es el conjunto de tecnologías que controlan y automatizan funciones de nuestro hogar mediante un dispositivo. Esto quiere decir que permiten manipular la calefacción o la luz directamente desde nuestro teléfono o tablet sin necesidad de tocar el termostato o el interruptor de la luz.

Por otro lado, y aunque todavía es un mercado incipiente, los altavoces inteligentes cumplen una labor de asistentes para realizar búsquedas en línea, comprar y pedir cosas mediante la voz. Por lo tanto, cero contacto de nuevo. 

En este bazar tecnológico también encontramos sensores ópticos o de movimiento. Abren y cierran puertas y encienden o apagan luces al activarse los sensores de detección óptica o de movimiento. Son la solución para acabar con la obsesión por limpiar pomos e interrumptores.

Actualmente en desarrollo, las tecnologías de reconocimiento facial y de voz se basan en las características únicas de cada usuario. Un ejemplo lo encontramos en CaixaBank, que ha empezado a usar la biometría en los cajeros automáticos como alternativa al número pin de la tarjeta. 

Sin embargo, faltan cosas por pulir. El reconocimiento por voz pensado para el exterior requiere tecnología que bloquee el sonido ambiente y tenga en cuenta que el usuario puede moverse mientras habla. En esta dirección trabaja Hi Auto, una startup de Israel que está desarrollando una solución que ejecuta las órdenes leyéndole los labios al conductor.

tecnología contactless

Útiles en la nueva normalidad

Fuera del ámbito del hogar, estas tecnologías permiten generar confianza en clientes y consumidores. Pueden ayudar a que sectores gravemente afectados por la pandemia, como el turismo o la restauración, eliminen la incertidumbre de un posible contagio en sus instalaciones.

El mes de junio, la startup de Singapur Vouch, que diseña conserjes digitales para hoteles, tuvo que doblar su plantilla debido a la gran demanda. Su tecnología permite que los huéspedes se comuniquen con recepción sin tocar el teléfono de la habitación. Simplemente tienen que escanear un código QR para activar un chatbot encargado de tramitar su solicitud.

La empresa de diseño de mobiliario para cocinas y baños Kohler también ha reportado un mayor interés en productos como sus retretes inteligentes. Además de tirar de la cadena de forma automática, abren y cierran la tapa mediante un temporizador y sensores, lo que evita así el contacto humano con cualquier parte de inodoro.

Los medios de transporte no se quedan atrás. El tren de alta velocidad Eurostar anunció en junio que adoptará tecnología de reconocimiento facial. El motivo es facilitar una alternativa para aquellos pasajeros que quieran hacer check-in sin contacto físico. Está previsto que comiencen a implementarla el año que viene en su ruta entre Francia y el Reino Unido. 

El aeropuerto de Abu Dhabi (Emiratos Árabes Unidos), por su parte, está introduciendo tecnología sin contacto desarrollada por la startup Meta Touch en 53 ascensores. El movimiento de las manos activa el panel de control y permite seleccionar funciones como el piso al que queremos desplazarnos.

Este mismo aeropuerto ya instaló una serie de robots encargados de esterilizar zonas reservadas al personal. SterixGates, unas cabinas diseminadas por la terminal, desinfectan en tres segundos y de forma segura a cualquier usuario de la instalación.

En Nobbot | Un traje contra el coronavirus inspirado en los murciélagos

Imágenes | Pixabay, Mashable Deals, Freepik

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *