Ya no es una novedad ver un holograma en 3D. La tecnología ha evolucionado tanto que hemos normalizado esta especie de marcianada que tanto nos gusta.
Normalmente, los hologramas en 3D que podemos ver en las películas de ciencia ficción están creados a partir de la luz, pero un grupo de investigadores de la Universidad de Sussex (Reino Unido) ha encontrado otra forma de hacerlo.
Levitación y luz para crear hologramas 3D
Tal y como recoge Muy Interesante, los autores han logrado proyectar letras, números, figuras geométricas, una cara, una mariposa y un globo terráqueo. El sistema funciona a través de ultrasonido, una tecnología que hace levitar pequeñas partículas de poliespan y las ilumina con luz roja, verde y azul, es decir, el código RGB en función del objeto que se quiera representar.
Además, MATD es capaz de escanear el contenido en tan solo 0,1 segundos, el mismo tiempo que tarda el ojo humano en integrar los distintos estímulos lumínicos. El sistema opera a 40 kilohercios, lo que equivale a 40.000 actualizaciones por segundo.
“El dispositivo base es un display que genera contenido volumétrico en 3D, formas que flotan en el aire delante de ti, pero al mismo tiempo puede producir audios y sensaciones táctiles que sientes con tus propias manos; es decir, ver, sentir y oír todo a la vez”, explica el investigador español Diego Martínez-Plasencia, miembro del equipo, para Agencia Sinc.
¿Sentir los hologramas?
Uno de los aspectos más novedosos que incorpora este experimento es la creación de puntos de alta presión. El dispositivo MATD está formado por una serie de transductores capaces de focalizarse de forma conjunta hacia un mismo punto. De esta forma, se crea una especie de botón virtual que un dedo puede sentir. La clave se encuentra en la variación de las vibraciones, ya que el cuerpo humano no detecta los 40 kHz. Como si de una frecuencia modulada de radio se tratase, los investigadores han sido capaces de generar un audio de calidad que se sincronice a la perfección con el movimiento de las partículas utilizadas.
«Nos dimos cuenta que no hacía falta tanta potencia para mover la partícula. Cada tres o cuatro actualizaciones podíamos dedicar una para generar la sensación táctil. Durante ese tiempo la partícula queda libre, pero no pasa nada, enseguida se captura otra vez. Así podíamos proyectar, por ejemplo, una cuenta atrás, que se podía parar con el botón virtual. En esta caso hay dos trampas acústicas, pero el dispositivo las genera una a una, aunque muy rápido”, dice el coautor para Agencia Sinc.
Futuras aplicaciones
En cuanto a las utilidades futuras del sistema, los investigadores aseguran que es aplicable en campos tan diversos como la informática, la arquitectura o los procedimientos biomédicos. Además, tal y como recoge Muy Interesante, podría ayudar a los científicos a manipular la materia sin tocarla y, en consecuencia, sin contaminarla. Esto permitiría mezclar productos químicos o realizar levitación por ultrasonido para administrar medicamentos con precisión en los tejidos.
“Este dispositivo supone un primer paso en un campo que puede llegar a ser revolucionario, ya que demostramos que se puede controlar la materia y estimular tres sentidos a la vez”, señala Martínez para Agencia Sinc.
Artículo publicado originalmente en Agencia Sinc