Una lengua impresa en 3D que te dirá si eres fan de las acelgas sin probarlas

lengua

«¿Cómo vas a saber que no te gusta si no lo pruebas?» decían nuestras madres y abuelas muy sabiamente. Ante tal argumento, poco o nada podíamos hacer a parte de probar un bocado de ese plato ante el que tanto nos habíamos resistido.

Pero los tiempos cambian y la impresión 3D viene para desmontar el mejor arma de todos aquellos que querían que nos comiésemos el brocolí.

Un grupo de científicos de la Universidad de Leeds han creado una superficie cuya textura se asemeja enormemente a la de una lengua. Para ello, han utilizado la técnica de la impresión 3D que les ha permitido recrear características tales como la forma, la elasticidad y la humectabilidad.

la complejidad de nuestra lengua

La naturaleza enrevesada y complicada de la superficie biológica de la lengua ha ralentizado y planteado desafíos en la replicación artificial, agregando obstáculos importantes para el desarrollo y la detección de tratamientos o terapias efectivas y duraderas, por ejemplo, para el síndrome de boca seca: aproximadamente el 10% de la población general y el 30% de las personas mayores sufre de boca seca.

En palabras de Efren Andablo-Reyes, autor del estudio, «la recreación de la superficie de una lengua humana promedio conlleva desafíos arquitectónicos únicos. Cientos de pequeñas estructuras parecidas a brotes llamadas papilas le dan a la lengua su textura rugosa característica que, en combinación con la naturaleza suave del tejido, crea un paisaje complicado de un perspectiva mecánica».

lengua
Universidad de Leeds

Para poder alcanzar esa ansiada lengua en 3D, el equipo tomó impresiones de silicona de las superficies de la lengua de quince adultos. Las impresiones se escanearon ópticamente en 3D para mapear las dimensiones de las papilas, la densidad y la rugosidad promedio de las lenguas. A continuación, se utilizaron simulaciones por ordenador y modelado matemático para crear una superficie artificial impresa en 3D que funciona como un molde que contiene pozos con la forma y dimensiones de las diferentes papilas distribuidas aleatoriamente por la superficie.

Por último, la superficie artificial se imprimió en 3D utilizando tecnología de procesamiento de luz digital con sede en la Escuela de Ingeniería Mecánica de Leeds.

Entre otros usos, la creación de esta lengua artificial permitiría agilizar y facilitar el cribado de productos de nuevo diseño sin la necesidad de ensayos en humanos en las primeras etapas. Teniendo en cuenta los costes de estos procesos y que la pandemia de la COVID-19 arrecia, los ensayos sensoriales deben buscar alternativas que permitan continuar la actividad.

Además, para los investigadores este estudio pretende convertirse en un camino de investigación que nos permita conocer y comprender cómo la biomecánica de la lengua sustenta los fundamentos de la alimentación y el habla humanos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *