Las apps parecen estar al alcance de todo el mundo. Con tan solo realizar una pequeña búsqueda en una store y, en algunos casos, pagar un determinado importe, cualquier puede acceder a la aplicación móvil que desee. Pero, como todo en la vida, esto no es del todo cierto.
Un Rolls-Royce a cambio de una app ¿te compensa?
Esta aplicación, solo apta para un selecto grupo de gente, no está recubierta de oro ni nos invita a comer langosta en el desayuno, la comida y la cena. Simplemente (si es que esto se puede considerar simple) impone como requisito para los usuarios tener un precioso y reluciente Rolls-Royce. Remarcamos eso de reluciente porque no vale que lo hayas heredado de tu bisabuelo ni que lo hayas comprado de tercera mano. Tiene que ser nuevecito.
Esta app ha recibido el nombre de Whispers, ya sabemos que en la alta sociedad todo se habla en susurros ¿no? El caso es que, si queremos registrarnos en esta selecta aplicación de Rolls-Royce, debemos solicitar acceso a través de la web oficial de la marca. Además, antes de comenzar nuestra lujosa aventura digital, se nos pedirá un número identificador de nuestro coche. La app registrará el número y comprobará que no estamos intentando dar gato por liebre.
«Para los propietarios de Rolls-Royce, Whispers abre nuevos horizontes y permite el acceso a las experiencias más memorables. Descubre un mundo en el que las oportunidades únicas de conectar se encuentran con posibilidades sin igual» aseguran desde la web de la app. Tampoco dicen nada del otro mundo ¿no?
Después de esta retahíla de lujo y exclusividad, os preguntaréis para qué sirve exactamente la aplicación de Rolls-Royce. Aquellos usuarios que tengan la suerte de disfrutar de este privilegio podrán acceder a una amplia oferta de eventos y material audiovisual que, además, estará personalizada gracias a un consejero disponible 24 horas. Vamos, que si te aburres un sábado por la noche y no sabes qué película ver, le preguntas al consejero y te olvidas de las recomendaciones de los algoritmos.
La verdad es que, si el precio de esta aplicación es comprarse un Rolls-Royce, seguramente más de uno se mantenga fiel a Netflix y a las páginas de eventos de revistas y periódicos. Pero oigan, si les compensa comprarse un cochazo, adelante. No olviden que lleva una app de regalo.