Año tras año se repiten los mismos problemas con las contraseñas en algún servicio online. Miles de contraseñas quedan al descubierto y comprobamos como se repiten las contraseñas más habituales. Lo aconsejable es tener una contraseña fuerte para cada servicio online que utilizamos. Por eso las herramientas para la gestión de contraseñas son cada día una utilidad imprescindible en nuestro día a día. Vamos a hacer un repaso a las diversas aplicaciones gestoras de contraseñas en nuestra guía definitiva para que puedas saber si son para ti o no.
Es complicado generar una contraseña diferente para cada servicio que utilizamos, que tenga la suficiente longitud, incluya números, letras mayúsculas y minúsculas además de signos. Y además recordarla. Por eso tenemos las aplicaciones gestoras de contraseñas que nos ayudan a generar passwords fuertes, almacenarlas y tenerlas a nuestra disposición tanto en los navegadores web o también en las aplicaciones para tablets y smartphones.
¿Qué le pedimos a una aplicación gestora de contraseñas?
Las aplicaciones gestoras de contraseñas nos ayudan a generar una password fuerte, con una longitud adecuada y de esas en las que parece que un gato ha estado caminando por encima del teclado. Además, nos la guarda y cuando accedemos a un servicio, nos ayuda a introducir de forma automática usuario y contraseña, de manera que evitamos también el peligro de identificación de una contraseña utilizando un keylogger.
Después que tenga aplicaciones tanto para los navegadores web, que suelen ser en forma de extensiones, como también para dispositivos móviles y tablets. De esta manera las contraseñas fuertes que hemos generado podemos aplicarlas en para acceder a cada servicio sin mayores inconvenientes. Lo más seguro sería recordarlas nosotros, pero esto a medida que crece el número de lugares a los que accedemos resulta más complicado. Por eso es importante que las gestoras de contraseñas estén disponibles en los principales dispositivos que utilizamos.
También que se puedan sincronizar las contraseñas. Otro de los paradigmas de la seguridad implica que tenemos que cambiar las passwords de forma frecuente, de manera que si hemos cambiado la contraseña a través del navegador web, nuestro gestor de contraseñas sepa reconocer que se ha producido un cambio y nos ofrezca sustituir la contraseña antigua. De esta manera, al acceder más tarde desde el smartphone, si tenemos que volver a introducir usuario y contraseña, el gestor nos identificará ya con la nueva que hemos cambiado.
Por último es importante que el almacén de contraseñas esté cifrado, para que en caso de que exista algún problema no se comprometa la seguridad de todos los sitios a los que accedemos. También que la sincronización se realice a través del propio servicio de contraseñas, en lugar de hacerlo a través de servicios externos.
Por último, una opción extra que ofrecen algunos de estas aplicaciones gestoras es utilizar sus almacenes para guardar documentos digitales, como el DNI, el pasaporte, tarjetas de crédito, o contraseñas de redes WiFis a las que nos hemos conectado en algún momento y están almacenadas en nuestro ordenador.
¿Necesito complicarme tanto la vida?
Una vez que hemos visto la utilidad de este tipo de aplicaciones lo siguiente que deberíamos preguntarnos es si ¿necesitamos complicarnos tanto la vida? Todo depende del nivel de seguridad que queramos alcanzar. Si lo que buscamos es tener sólo unas cuantas contraseñas seguras y largas, podemos crear alguna regla mnemotécnica que nos ayude a recordarla, sustituyendo alguna letra por signos o números o utilizando mayúsculas y minúsculas de forma aleatoria.
Aquí podemos jugar con una serie de contraseñas, tres o cuatro, en función de los servicios que utilizamos y la importancia en la seguridad que alcanzan para nosotros. Lo ideal es que las contraseñas sean siempre fuertes y además reservar algunas que no utilizamos más que para servicios individuales, como puede ser el acceso al banco o a una cuenta de PayPal, por citar algún ejemplo. De esta forma tendríamos nuestra vida digital organizada de forma más o menos segura. Si queremos más, tendremos que apostar por las aplicaciones gestoras de contraseñas. Vamos a ver algunas de las mejores.
1Password, una gran opción para gestionar tus contraseñas
1Password es una de las mejores. Dispone de aplicaciones para Windows, Mac, Android y iOS. Nos ayuda a generar contraseñas fuertes para cada aplicación o acceso web que utilizamos. Además las mantiene organizadas en nuestro perfil, permitiéndonos separarlas para que sea más fácil encontrar. Nos permite también guardar documentos digitales y notas seguras, como puede ser nuestro DNI, pasaporte o datos de nuestras tarjetas de crédito.
La parte negativa es que la sincronización entre distintos dispositivos y las contraseñas la realiza a través de Dropbox o iCloud, depende de la cantidad de dispositivos que utilicemos. Esto no acaba de ser un pequeño inconveniente, si lo que buscamos es tener todo reunido en un mismo servicio y minimizar los riesgos de seguridad.
KeePass, el gestor de contraseñas de código libre
KeePass es una aplicación gestora de contraseñas de código libre, lo que para muchos es una garantía ya que no tenemos que depender de las decisiones de una empresa para nuestra seguridad personal. Sin embargo, esto también tiene sus inconvenientes, ya que no tiene sincronización entre los distintas aplicaciones para sus sistemas operativos o los dispositivos móviles, tanto en Android como iOS.
De esta forma si nos movemos entre varios dispositivos quizás sea la más incómoda de utilizar, lo que al final nos puede llevar a relajar nuestro nivel de seguridad o dejar de utilizar esta gestora de contraseñas. Además todo el proceso de creación o modificación de contraseñas es más cómodo hacerlo a través de un Pc que en dispositivos móviles y luego copiar el archivo de la base de datos para utilizarlo en los dispositivos móviles, utilizando servicios de almacenamiento en la nube, por ejemplo.
LastPasssword, el servicio más cómodo de utilizar
LastPass quizás sea el servicio más completo y más cómodo de utilizar. No sólo nos ayuda a generar contraseñas fuertes y a custodiarlas, también podemos añadir los datos de formularios que tenemos que rellenar para darnos de alta en diferentes perfiles, guarda notas seguras, o las contraseñas de las WiFis de nuestro ordenador. Toda la información la mantiene sincronizada, así que basta con instalar la extensión para el navegador que utilizamos para tener nuestras contraseñas a mano.
Además dispone de aplicaciones para smartphones, aunque es un servicio de pago, siempre podemos utilizar el acceso a través del navegador donde podemos copiarnos la contraseña que nos ha generado el gestor, un poco más incómodo que la propia app pero nos saca del paso de forma solvente. Lo cierto es que en los dispositivos móviles no tenemos que estar introduciendo las contraseñas de acceso a las aplicaciones que utilizamos cada vez que iniciamos la sesión.
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Imágenes | succo | geralt | Juan J. Martínez