Los fondos europeos, claves para la cohesión territorial gracias a las redes de telecomunicaciones

Fondos europeos Orange 5GLa nueva tecnología de red móvil 5G puede contribuir a llevar los beneficios de la digitalización a todos los rincones de España y los fondos europeos son claves para acelerar su implantación.

Consciente de esta oportunidad que ofrece para el país la nueva red 5G, Orange ha anunciado recientemente el lanzamiento de servicios 5G SA (“Stand Alone”), la evolución tecnológica que permite el desarrollo de nuevos servicios y aplicaciones que anticipan el futuro, un futuro que debe estar al alcance de todos. Además, inició, el pasado año, el mayor despliegue de un operador español en 5G utilizando la banda de 700 MHz, esencial para reducir la brecha digital territorial en España.

La compañía, que lleva la delantera en el desarrollo de 5G al resto de operadoras, ha hecho una gran apuesta inversora por esta nueva red móvil con la que ya ofrece una extensa cobertura. En total, Orange ha dedicado un total de 531 millones de euros a la adquisición de frecuencias 5G en todas las bandas a lo largo de las distintas subastas en las que ha participado, desde 2016 hasta la más reciente en diciembre de 2022.

orange y su apuesta por el 5G

Sin embargo, esta reseñable iniciativa privada protagonizada por Orange y otros compañías debe complementarse con el esfuerzo público para impulsar el desarrollo de zonas que actualmente tienen riesgo de despoblación y que, gracias a las nuevas tecnologías, se pueden convertir en sitios idóneos donde teletrabajar y vivir con mejores condiciones de vida, arraigando nueva población. Por ello, Orange ha contribuido con su visión a los planes presentados por el Gobierno para impulsar la conectividad en esos entornos.

Hay un convencimiento de que los fondos europeos Next Generation, que consideran la transición digital uno de sus ejes transversales, ofrecen una oportunidad extraordinaria para adaptar nuestra economía al nuevo contexto global, impulsando, a través de la digitalización, la actividad económica en sectores clave y esenciales (industria, logística, alimentación, sanidad, transporte, educación…), asegurando la conectividad en zonas de menor densidad poblacional; y reduciendo la brecha digital de los más vulnerables, para facilitar así su integración y empleabilidad.

Gracias a los fondos europeos, España se encuentra ante la posibilidad histórica de acelerar el despliegue de las infraestructuras de banda ancha, tanto fijas con FTTH como móviles con 5G, en aquellas áreas rurales donde la rentabilidad de estas inversiones es difícil. Hay que tener en cuenta que la Unión Europea recomendó que se dedicara, al menos, un 20% de los 750.000 millones totales del plan de recuperación Next Generation en digitalización y esa cifra es mayor en el caso de España, donde el porcentaje alcanzará el 33%.

Estamos hablando de una inyección de fondos europeos sin parangón. El presidente Pedro Sánchez ha destacado que los 140.000 millones de euros que España percibirá hasta 2026 para invertir en la modernización del tejido productivo suponen una cantidad semejante a los fondos de cohesión recibidos a lo largo de 34 años.

fondos europeos  y colaboración público-privada

Esta gran inversión puede beneficiar a diferentes sectores productivos de la economía y permitirá impulsar de forma decisiva la transformación digital de la sociedad y el tejido empresarial en España, también en el entorno rural. Tanto es así, que estudios de la Comisión Europea estiman que la sola introducción del 5G en las industrias de automoción, salud, transporte y utilities podría reportar unos beneficios indirectos de 14.600 millones de euros en 2025 en nuestro país, además de un significativo impacto positivo en la generación de empleo.

Como vemos, se abre un gran horizonte de desarrollo para el país que solo se podrá alcanzar si se agiliza el uso de estos fondos a través de una colaboración público-privada eficiente y solidaria.

Será a través del compromiso de todos que se podrá dar forma a un futuro mejor para todos los españoles, también para aquellos que hoy se encuentran en eso que se ha dado en llamar “la España vaciada” y que ven en la digitalización propiciada por las redes de telecomunicaciones una gran oportunidad para el desarrollo exitoso de sus proyectos vitales y empresariales. Por ellos, por todos, no hay tiempo que perder.

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