LudoSport, la academia que te enseña a luchar como un ‘jedi’ (o un ‘sith’) de ‘Star Wars’

A medio camino entre un arte marcial y la esgrima, el combate deportivo con sables de luz creado por la Academia LudoSport adapta el uso del mítico sable de luz de los caballeros jedi de la saga de ‘Star Wars’ a la práctica deportiva.

Ricardo Navarro, cofundador y rector de LudoSport Madrid, explica las características de esta disciplina deportiva, presente en doce países, que está cerca de ser reconocida con una federación propia.

– Este deporte empezó en Milán (Italia) en 2006 con una pequeña Academia  fundada por Simone Spreafico, Gianluca Longo y Fabio Monticellil, apasionados del universo ‘Star Wars’. ¿Cómo entráis en contacto con ellos?

Nuestros maestros, que, además de aficionados a ‘Star Wars’, habían practicado artes marciales o esgrima, deciden adaptar los combates con sables de luz que aparecen en las películas a un entorno deportivo. Lo que hicieron fue analizar los gestos aparecían en cada uno de los combates, que son coreografías diseñadas por un maestro de esgrima. Con esta premisa, y tras consultar con diversos maestros de distintas disciplinas de artes marciales, adaptaron estas técnicas a un nuevo conjunto de maniobras con un arma que aparece en las películas para acercarlo a la esgrima deportiva.

Ricardo Navarro, cofundador y rector de LudoSport Madrid
Ricardo Navarro, cofundador y rector de LudoSport Madrid

– En 2015  abres con Guillermo Serra LudoSport Madrid. ¿De qué os conocías y por qué os animasteis a abrir la Academia?

Con Guillermo no nos conocíamos de nada. Ambos entramos en contacto con esta disciplina cuando leímos en la prensa que un padre y un hijo acababan de abrir una academia en Bélgica. A mí, que vengo del mundo de la esgrima deportiva y soy un gran aficionado a Star Wars, me llamó mucho la atención que no hubiera ninguna en España. Contacté con los maestros de Milán y me dijeron que había otra persona que estaba buscando información para llevar el deporte a España y así fue como nos conocimos.

Nos dijeron que ellos no iban a mandar instructores a España, sino que teníamos que formarnos en Italia. Una vez obtuvimos el título, el sistema funciona como una franquicia que se exporta a distintos países del mundo. Gullermo es informático y yo soy politólogo, pero nos une nuestra afición por ‘Star Wars’, así que decidimos que valía la pena asociarnos y traerlo a España.

– ¿Cuál ha sido la expansión de las academias LudoSport?

Empezó en Milán y luego se fue expandiendo por Italia. El primer país extranjero, si mal no recuerdo, fue Suecia, y luego el Reino Unido. Le siguieron Bélgica, Francia y España. Ahora mismo estamos en 12 países, desde Hawái a la isla de Reunión.

– ¿Cómo os disteis a conocer en Madrid?

Italia nos propuso organizar un evento coincidiendo con el estreno de ‘El despertar de la fuerza’ que se llamó ‘Madrid Awakens’. Los maestros fundadores y varios instructores hicimos un taller en el que se apuntaron varias personas. A partir de esa acción de promoción abrimos la primera clase con diez alumnos.

– Hoy  tenéis más de 130 alumnos y 8 instructores. ¿Mantenéis estas cifras con la pandemia?

Habíamos llegado a tener 150 alumnos, aunque la cifra ha bajado a 118. Ha habido un bajón, como es lógico, pero nos estamos recuperando. Actualmente tenemos cuatro instructores en activo; tres en la academia de El Templo y otro en la escuela que tenemos en Fuenlabrada.

«Los primeros dos o tres años pasamos de tener una academia en Madrid a abrir en Barcelona y León, y ahora en verano, si mejora la situación, habrán academias en Mallorca, Valencia y Murcia»

– LudoSport Madrid es la academia internacional que mayor crecimiento ha tenido en más de una década de historia de LudoSport. ¿A qué lo asociáis?

La disciplina conjuga la diversión de usar una herramienta que aparece en las películas con la práctica del deporte que, como todos sabemos, es algo saludable. Habrá gente que, por ejemplo, no le gustará ir al gimnasio, pero si les propones una actividad física en la que además se van a divertir porque de alguna manera están jugando con una espada de luz, resulta atractivo para mucha gente. Los primeros dos o tres años pasamos de tener una academia en Madrid a abrir en Barcelona y León y ahora en verano, si mejora la situación, habrá academias en Mallorca, Valencia y Murcia. Cada rector que quiere abrir una academia lo gestiona directamente con Italia, aunque nosotros damos apoyo desde Madrid.

– El combate deportivo con sables de luz se inspira en el aikido, el judo, el ju-jitsu y la esgrima medieval. ¿Qué similitudes comparte?

Podría ser más parecido a cosas que se hacen en kendo, aunque nosotros no practicamos kendo o esgrima deportiva con un sable de luz. Es un combate deportivo con técnicas propias que están justificadas por la herramienta que utilizamos.

– LudoSport cuenta con su propio sable de luz, la Polaris, un sable diseñado y construido específicamente para el rendimiento óptimo en el deporte. 

Al conceptualizar este deporte, nuestros maestros diseñaron un arma que se ciñera a la disciplina. El sable lo fabrica Lama di Luce, que es el fabricante oficial de LudoSport, y el diseñador es uno de los primeros alumnos que tuvieron en Milán. No es la única espada que se puede utilizar pero es la que mejor se adapta al sistema deportivo. 

– El deporte es mixto, algo que sucede en pocos deportes. 

Esta es otra clave del éxito, ya que nuestra disciplina es moderna e inclusiva, ya no solo por el sexo, sino por la edad. Si la comparamos con la esgrima deportiva, en la que hay tres armas distintas, los chicos y las chicas tiran en categorías separadas y existen divisiones de edad. Nosotros también tenemos tres armas distintas pero se pueden mezclar. A partir de los 12 años cualquiera puede competir en la misma categoría. Es un deporte que depende de la habilidad de cada uno en manejar la herramienta, no del sexo o la edad.

– Madrid acogió en 2019 la primera edición del Champions Arena celebrado fuera de Italia. ¿Qué supuso para vosotros organizar el torneo internacional por excelencia? 

Fue un éxito porque vinieron muchos competidores extranjeros y tuvo una aceptación muy interesante a nivel de público. Los maestros nos ofrecieron esta posibilidad porque llevaban un tiempo pensando en sacar la Champions de Milán, ya que con su expansión no tenía sentido que se celebrara siempre en la misma sede. Y pensaron en nosotros porque España es la segunda potencia de LudoSport en el mundo.

«Estamos en negociaciones con la Real Federación Española de Esgrima para el reconocimiento de una federación propia»

– ¿Trabajáis en LudoSport a jornada completa?

Desde el principio nos lo planteamos como un complemento a nuestros trabajos. La situación actual no nos permite afirmar si es o no un negocio rentable. Lo tendrá que ser en el futuro porque es muy atractivo y seguro que pronto volveremos a los número que teníamos antes. A medida que abran más academias en España crecerá el interés de la comunidad y ayudará al desarrollo del conjunto.

– ¿El deporte tiene reconocimiento oficial?

Estamos en negociaciones con la Real Federación  Española de Esgrima para el reconocimiento de una federación propia. Les ha sorprendido la profundidad de la disciplina y de la propia organización, del sistema de franquicias y su internacionalidad, lo que demuestra que lo que ofrecemos es serio. Existe una Comisión Internacional de Árbitros y Jueces de Estilo y un Concilio, en el que España tiene presencia al más alto nivel ya que yo soy uno de los comisionados.


El problema de los deportes nuevos es que necesitan tiempo para crear una masa suficiente de personas que lo practiquen y optar a una federación propia. En Italia empezaron en 2006 y son los que llevan el liderazgo de federar nuestra disciplina en todo el mundo. Por ejemplo, la federación francesa de esgrima deportiva ha reconocido la disciplina de combate con sable de luz como una disciplina añadida y esto es algo que estamos intentando hacer aquí también. 

– ¿Las olimpiadas serían, por tanto, una meta a medio-largo plazo?

Es un sueño que tenemos y del que hablamos a menudo. No hay ningún motivo que nos impida optar a ser deporte olímpico porque desde el nacimiento de la disciplina nuestros maestros se han adherido al espíritu olímpico y a sus valores. 

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Imágenes | Cedidas por LudoSport Madrid

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