Samsung ha querido ir más allá y ha creado una piel electrónica que se ajusta a la muñeca y que es capaz de medir y mostrar en tiempo real el ritmo cardíaco de una persona.
Gracias al uso del OLED este dispositivo se puede estirar hasta en un 30 % sin presentar problemas en su funcionamiento. Asimismo, los investigadores del área de investigación y desarrollo de Samsung, observaron que la piel electrónica mostraba resultados precisos incluso después de ser extendida hasta 1000 veces su longitud.
Samsung sustituye el plástico por elastómero
Con el objetivo de ganar flexibilidad, Samsung ha remplazado el plástico que suele utilizar en las pantallas extensibles por elastómero, un sofisticado material con gran elasticidad y resistencia. Al tratarse de un dispositivo flexible, se adapta mejor al movimiento a la hora de fijarse en la piel del usuario para hacer una medición continua del ritmo cardíaco.
Los investigadores de Samsung están trabajando para ampliar la resolución, elasticidad y precisión de las mediciones del dispositivo para su producción en serie. Además, esperan poder incorporar pantallas flexibles a las lecturas de la presión arterial, la saturación periférica de oxígeno y para realizar un electromiograma.
La idea de incorporar a la piel distintos artilugios electrónicos para medir parámetros relacionados con la salud no es nueva. De hecho, antes de este avance de Samsung ya se han desarrollado parches o, incluso tatuajes digitales, con este cometido. Salud, seguridad, objetos conectados… Muchos elementos entran en juego para hablar de los wearables del mañana pensados para poder salvar vidas.