Llega el invierno y, con él, cómo todos los años, una nueva preocupación: la factura por la calefacción, ya sea la del gas o de la luz. Por ello, es muy importante saber cuál es la temperatura de la calefacción correcta para ahorrar lo máximo posible.
Sabemos que las facturas son un elemento estresante en nuestras vidas. Pero con la bajada de temperaturas tenemos que empezar a pensar en encender la calefacción.
Eso sí, no se trata de darle al botón de encendido en nuestra caldera y olvidarse de todo ni tener la tarifa energética más barata posible, ya sea regulada (TUR) o variable.
Lo importante es poner la calefacción a la temperatura correcta y mantener esos grados de forma continua.
Si cumples este principio y sigues algunos de los consejos que te vamos a dar, seguro que ahorrarás en la factura de la calefacción este invierno y ayudarás a reducir tus emisiones contaminantes. En definitiva, este invierno vivirás en una casa más confortable, en temperatura, y más ecológica.
¿Cuál es la temperatura ideal para la calefacción?
Si todavía no sabes a qué temperatura poner la calefacción este invierno, la ciencia por fin ha encontrado el consenso para responder a cuál es la temperatura ideal para ahorrar energía.
Si acudimos al último estudio del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) descubrimos que tenemos que poner la temperatura de la calefacción en nuestras casas entre 19 y 21 grados centígrados.
Eso sí, aclaran que la temperatura ideal de la calefacción depende de cada persona, pues cada uno tenemos una graduación interna diferente. Por ello, para saber cuál es la tuya, dentro de la horquilla de 19 y 21, se tiene en cuenta que la diferencia entre la temperatura de tu hogar y la del exterior no sea superior a 12 grados.
Pero, ¿debemos mantener esa temperatura de noche en la calefacción? Por la noche y en invierno, lo normal es poner nuestra caldera o calefacción entre 15 y 17 grados, según la ciencia.
Truco: Mantener una temperatura constante en tu calefacción
Te vamos a dar un truco para aprender cómo poner la calefacción para gastar menos.
Recordamos que la temperatura ideal de la calefacción se encuentra en una horquilla entre los 19 y 21 grados centígrados, pero el truco es mantener una graduación continua durante todo el día.
Al menos, hasta que llegue la noche, no hay que bajar ni un grado y nunca dejar que supere los 23 ºC, porque el aire empieza a resecarse.
Subir un solo grado la temperatura de la calefacción implica subir un 7% nuestra factura, por ejemplo, de la luz.
Otros 10 consejos para ahorrar en la factura de la calefacción
Una vez sabemos cuál es la temperatura ideal para poner la calefacción, es el momento de que aprendas estos 10 tips para ahorrar en tu factura mientras estás calentito en tu hogar.
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- Un clásico de todos los inviernos: Extrae el aire de los radiadores. Si tu calefacción es de gas, para conseguir la mayor eficiencia energética, tienes que sacar el aire que queda acumulado en los radiadores. Hay que hacerlo cada año para evitar burbujas que dificultan la circulación del calor.
- Cambia tu caldera por una de bajo consumo. Instalar una nueva caldera puede ser caro, pero si es de bajo consumo, a largo plazo, el ahorro será mucho mayor.
- Revisiones periódicas. Si no puedes invertir en una caldera de bajo consumo, haz revisiones todos los años de tu instalación para asegurar la máxima eficiencia y sostenibilidad.
- Si la habitación está vacía, apaga el radiador. Es un desperdicio de energía y estás contaminando.
- Nunca cubras los radiadores. Sabemos que dejar los radiadores a la vista, en ocasiones, es antiestético, pero es mucho mejor que no los cubras.
El simple hecho de poner una camiseta sobre un radiador, con la intención de que se seque, aumenta tu factura. Has creado lo que se llama “una barrera térmica” y los radiadores y tu caldera tendrán que esforzarse más para alcanzar la temperatura ideal en la calefacción de tu casa.
- Instala termostatos inteligentes. Controlar la temperatura de la calefacción con un termostato es el mejor consejo que puedes seguir. Y si este es un dispositivo inteligente, mejor.
- Aislar puertas y ventanas. Con unas ventanas de doble cristal consigues un ahorro del 50% en tu factura. Nuestro consejo es que además aproveches para decorar y aislar tus suelos con alfombras.
- Ventila, pero poco tiempo. Lo ideal es que abras las ventanas por la mañana y unos 10 minutos, para que no baje mucho la temperatura interior. Luego, pon la calefacción entre 18 y 21 grados y, al alcanzarla, mantenerla de forma constante.
- Persianas y cortinas para algo más que decorar. Al igual que con el truco de las alfombras para el suelo, puedes aislar mejor tus paredes y ventanas colgando persianas y estores. O las clásicas cortinas.
Otro tip: Por el día, sube las persianas para aprovechar el calor del sol y la luz. Pero bájalas por la noche, actúan como aislantes para mantener el calor.
- Los paneles reflectantes. Si los colocas detrás de los radiadores, puedes conseguir un ahorro de un 10% y hasta del 20%. El calor no se acumulará en la pared y circulará mejor por la estancia.
Y recuerda, pon entre 19 y 21 grados la temperatura de la calefacción para entrar siempre calentito en tu casa y no tener que preocuparte en exceso de tu factura de gas o de la luz.